miércoles, 15 de junio de 2011

URANIA

Miras tus manos y ves al cielo con timidez
Las vuelves a mirar y piensas que nada tiene validez
Rebuscas en tus bolsillos con avidez
En un arranque frenético de miedo y estupidez
Estás parado bajo el cielo y su sencillez
Y te sigues preguntando lo mismo una y otra vez
Caminando te has enredado en tus pies
Y ahora ves el mundo totalmente al revés.

Tocas tu ombligo pero aun sigues sin entender
Se trata de un mal sueño o pesadilla al parecer
Gritas, lloras y, lo que ocurre, sigues sin saber
Te has quedado solo y aun no alcanzas a comprender
Que no hay nadie a tu alrededor que te diga que hacer
No te das cuenta que tienes el poder
De hacer que las cosas funcionen como deben ser
Pero es tarde, el curso de las cosas no puedes detener.

Entonces a lo lejos alcanzas a ver un cuerpo brillante
Te animas a dar un paso adelante
Y de pronto te encuentras flotante
Alrededor hay muchos más que esperan expectantes
A que te caigas y que te duela bastante
El temor te ha dominado en un instante
Y tu cabeza se llenó de cosas aberrantes
Alrededor hay muchos que ahora se ven pequeños y distantes.

Abres los ojos y no puedes distinguir colores
El ambiente denso colmado de olores
Trae a tu mente ciertos pudores
Estas desnudo y rodeado de extraños observadores
Y al verte despertar, de su cuerpo brotan secreciones
Comprendiste que serías sometido a una serie de horrores
Y fuiste atravesado sin piedad, sangrabas por montones
Despiertas y estás solo, todo fue un mal sueño supones.

Abres los ojos y ves al cielo de nuevo
Observando las nubes y a las aves que alzan vuelo
Has caído sin darte cuenta en un profundo sueño
Despiertas y una vez más estás al ras del suelo
Y solo puedes ver esos horribles y largos dedos
Serían miles o cientos con abundantes agujeros
Seres sin rostro te miraban con esmero
Asustado y conmovido escuchaste sus credos.

“Bienvenido a Urania ser despreciable
Somos lo que llamas Dios, somos muy amables
Esto es bello y necesario, aunque te parezca abominable”
No entendía tu cerebro tales palabras execrables
Ni siquiera eran palabras esos ruidos inimaginables
La verdad mas que nunca era inalcanzable
Han ocultado verdades de valor inmensurable
¿Acaso lo que has vivido hasta ahora es una mentira infame?

Errante, sin identidad en un mundo perverso
Observando dentro de cada ser, el misterioso universo
No existes para nadie, pero sigues aquí atento
Dentro de poco, el mundo se volverá violento
Cuando lo que solo tú sabes, esté totalmente disperso
Nadie podrá entender con facilidad, será un tormento
La confusión reinará, se ha oscurecido el firmamento
Ha empezado la destrucción del fin de los tiempos.

Tu cuerpo segmentado yace en la tierra
Pisoteado y olvidado por los que aun viven en ella
“La revolución” culminó, ha terminado la guerra
Los hombres no aceptaron la verdad, no creyeron en ella
Y la verdad fue develada, bajó desde las estrellas
Es muy tarde para pensar en el loco de la historia aquella
Los hombres acabaron con él, no quedó huella
Por gritarle al mundo una verdad que consideraron blasfema.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Son contadas las veces que descubro que volviste a compartir tus textos. Dudo que material te falte, quiza tiempo. No lo se.
Como siempre, Edith Nin, directo en el clavo, en la herida, en el ligero sarcasmo y la oculta ternura.
Es un placer. Eres un placer.
Abrazos, entonces.

Unknown dijo...

Edith nin fantastico otro día Invita pues